Un balde de agua fría fue el que recibimos por parte de la Contralora General de la República en la audiencia que nos concedió esta semana, junto a los consejos consultivos y gremios de la salud de la Provincia del Choapa. Cuando creíamos haber superado el obstáculo más difícil tras la suspensión del contrato de concesión del nuevo Hospital de La Serena, la mala noticia vino esta vez en relación a la licitación del nuevo Hospital Provincial de mediana complejidad de Illapel.
La audiencia tenía por propósito conocer de propia fuente de la máxima autoridad del órgano contralor, el estado de toma de razón de la adjudicación de la ejecución; hasta ese momento los rumores señalaban que estaba detenida por un presunto reclamo de una de las empresas participantes. Grande fue nuestra decepción, sin embargo, cuando nos comunicaron de las múltiples observaciones al diseño del proyecto, que dicen relación con materias como el impacto vial o el cumplimiento de la norma sísmica. La buena noticia es que la propia Contralora Dorothy Pérez nos ofreció personalmente se pueda instalar una mesa de trabajo con el Servicio de Salud Coquimbo para subsanar estas observaciones y así iniciar obras este año.
En el pasado reciente como Región hemos demostrado que podemos sacar adelante buenos proyectos en plazos razonables: así ocurrió con el Hospital de Ovalle y el CDT de La Serena. Clave para ello es la estabilidad de los equipos técnicos y el apoyo en la Dirección de Arquitectura del Ministerio de Obras Públicas.
También fuimos a la reunión con la Contralora General junto al Consejo Consultivo y los gremios de la salud del Hospital de La Serena. No nos quedaremos tranquilos hasta que se tome razón de la tan esperada modificación del contrato, si queremos que efectivamente las obras del nuevo hospital y Centro Oncológico Regional comience sus obras en septiembre. Y es que hay que estar encima de los trámites, para que resulten, junto a las organizaciones sociales. En eso también consiste nuestra labor de representación.