El año que Chile no despegó

Termina este año 2024 con la sensación que, habiendo podido avanzar en múltiples frentes, nuestro país permaneció anclado, preso de sus múltiples contradicciones, y con un Gobierno carente de ambición.
En materia de inseguridad crímenes violentos marcaron el año: el impune asesinato del Teniente Ojeda, el atentado terrorista contra 3 carabineros en Cañete, el tiroteo en Lampa, fueron solo algunas muestras de un crimen organizado que avanza sin control, a pesar de la legislación aprobada el 2023, que otorga mayores herramientas a fiscales y policías para combatirlo.
La situación económica no marcó mejores resultados, con un mediocre 2% de crecimiento, que todo indica puede ser incluso inferior el 2025; con cientos de proyectos de inversión atrapados en la permisología y vacilaciones de quienes nos gobiernan. En nuestra Región el caso más palpable es Dominga, que a pesar de tener dos fallos favorables del Tribunal Ambiental sigue amenazado por una agenda woke desde La Moneda.
En Salud persisten preocupantes cifras de listas de espera, que deseamos puedan disminuir gracias al protocolo de acuerdo logrado en el Senado con la tramitación de la Ley de Presupuesto. Dentro de lo positivo en salud están los nuevos hospitales de La Serena, Coquimbo e Illapel, gracias a la persistencia y acuerdos entre todas las autoridades, los gremios y los consejos consultivos.
Todos estos problemas los hemos intentado enfrentar desde el Congreso, acordando un fast track en la agenda de seguridad y de reactivación económica. Ha habido resultados positivos, como el despacho de la Ley Antiterrorista o la Ley de Usurpaciones, que demostró resultados concretos en la disminución de este delito. En materia de inversión, esperamos que la izquierda resuelva sus contradicciones, y podamos por fin avanzar en las leyes que simplifican los permisos sectoriales y el sistema de evaluación ambiental.
Sin duda las elecciones de noviembre de 2025 serán una oportunidad para que Chile vuelva a crecer, y podamos caminar más tranquilos por las calles. Pero lo primero es lo primero: Enero debe ser la fecha del acuerdo en pensiones.